PEPE BORJA Y LA MAGIA DE LOS TÍTERES

 

PEPE BORJA Y LA MAGIA DE LOS TÍTERES

Por: Hélard Fuentes Pastor

No existe mejor confidente que un títere. Ese gesto inocente o esa mirada pícara, guarda las emociones del artista, sus temores y aquel sin número de anécdotas que se develan en el escenario.

José Ricardo es el testimonio vibrante de aquella confidencialidad. No solo ha dotado a sus muñecos de una personalidad singular, con ellos compartió y emprendió múltiples lecciones de vida.

Hoy, a sus 89 años, está considerado como uno de los maestros titiriteros más importantes de la región Sur de nuestro país, precisamente por sus años de trabajo y la calidad de su arte.

Durante la niñez, nunca imaginó que abriría paso en el mundo de la actuación gracias a los títeres; pues ese tiempo transcurrió con una timidez tremenda, en las aulas del colegio de La Salle.

Todo ocurrió en la juventud, cuando asistió a la presentación del titiritero Jaime Gonzales, quién en su gira desarrolló un taller de confección y manejo de títeres. Dicha experiencia duró aproximadamente un mes, y según ha manifestado el mismo artista, generó grata expectativa en la localidad. No obstante, con las semanas, ese centenar de participantes fue disminuyendo a tal punto que solo quedaron veinte cursantes.

De aquella ‘promoción’ –cuenta don Pepe– se formaron cinco grupos y cada uno tenía la misión de llevar a cabo un libreto y confeccionar sus personajes (R. Espada del Libertador, 2014). El que integraba Pepe, lo hizo en Miraflores, distrito que lo vio nacer un 1 de abril de 1932; un año después del matrimonio de sus padres, José Luis Borja Monje e Hilda Salinas Díaz, quienes se casaron el 30 de mayo de 1931, cuando él frisaba 28 años de edad y ella 25. La joven pareja tuvo otros hijos: Anita María Isabel, Ruth Antonieta, José Manuel y Alberto Luis.

Lo cierto es que ese primer ‘llamado’, le permitió cultivar la amistad del profesor Gonzales (pionero del arte de los títeres en Bolivia).

Tan pronto cerró esa etapa de aprendizaje, Pepe decidió consolidar su talento incorporándose al taller nacional que impartió el conocido grupo «Kusi Kusi» con su coterránea Victoria Morales Corrales y su esposo, el boliviano Gastón Aramayo, en el Parque de la Exposición de Lima.

Entonces, junto a otros participantes, realizaron la adaptación del cuento del Taita Arguedas: «El sueño del Pongo». Así se sumó al elenco y trabajó con ellos por el lapso de un año, incluso llegó a participar de una gira en Colombia.

A su retorno, decidió cultivar ese arte en nuestra ciudad, fundando el grupo de teatro de títeres «Paco Yunque», el cual ha dirigido desde 1974 –según advierten algunos especialistas– con alto nivel artístico. Pepe recibió el apoyo de dos destacadas figuras de las letras: el poeta José Ruiz Rosas y el lingüista Pedro Luis González Pastor.

Producir teatro de títeres en la ciudad, no ha sido cosa sencilla. Si bien puede resultar apasionante, por otra parte, fue un reto desarrollarlo en Arequipa.

Una de las presentaciones más emblemáticas, bajo percepción de Hugo Riveros (R. Encuentro) y Nelly Pilares Manrique (R. Teatralidades), es la obra: «La guerra de las estrellas y los erizos de mar», estrenada en los años 80 y aplaudida por varias generaciones. La última aparición debió darse en el 2018, en la sala Melgar del Paraninfo de la Universidad Nacional de San Agustín. En aquella oportunidad, también escenificó otras dos historias: «El vals de las flores» y «Orejitas y Chanchin».

Durante la entrevista que realizó Pilares, Pepe Borja mencionó que trabajó con algunos amigos como Coco Reyes o Enrique Montes de Oca (profesor de los salesianos), entre otros personajes.

Los lazos que estableció con el círculo cultural y artístico de su tiempo, permitieron promover y dignificar esa habilidad para el teatro, motivo por el cual fue considerado en el libro: «Panorámica del títere en Latinoamérica» que se publicó en Bilbao (España) en 1990 con la dirección de Concha de la Casa. Aquel año está considerado como un tiempo de fortalecimiento del arte titiritero en nuestro continente.

La vida de Pepe Borja también pasa por históricas actuaciones a nivel nacional, por ejemplo, integró el reparto de la película «La boca del lobo» (1988), dirigida por Francisco Lombardi que aborda la masacre de Socos en la época del terrorismo en el Perú.

Aquí nos cuenta lo siguiente: «Vino un señor designado a buscar personajes y no encontraba una persona que represente a un campesino. Yo le dije que podía ponerme un sombrero. Me dijo tráigame una foto y comencé a buscar un poncho (…) Todas las características de un campesino. Llevé las fotos y me aceptó». El rodaje se hizo en Tarata (Tacna).

Luego participó en la telenovela «Canela», emitida por Panamericana Televisión en 1995. Su producción estuvo en manos de Humberto Polar y se grabó en diferentes provincias del país. Pepe Borja protagonizó el papel de Indalecio. Asimismo, recuerda un tercer filme denominado: «Encuentros».

Otra de las cualidades que podemos destacar es la de profesor, pues según anota una resolución ministerial, es «formador de varias generaciones de docentes teatrales». Un verdadero maestro arequipeño, cuyas experiencias escénicas alternaron con sus estudios de Psicología en la Universidad Nacional de San Agustín, hasta que comenzó a dedicarse plenamente a los títeres.

No cabe duda que su mirada, no solo revela ese nivel de confidencialidad que hay entre el titiritero y sus muñecos, sino la llaneza que debe caracterizar a un artista. Ese talento asegura continuidad en su hija Beatriz y su nieta Nicole.

– ¡Qué alegría! –le expresamos con honestidad.

El destacado titiritero ha sido homenajeado en varias ocasiones.

En 1992, las profesoras Susana Zea y Miriam Zavala Gómez, coordinaron un concurso de cuento infantil y un festival de teatro-mimo que llevó su nombre. En el 2015, su trayectoria fue reconocida en el Festival Internacional de Río de Títeres, que contó con la participación de delegaciones argentinas, chilenas y nacionales. Y en el 2017, recibió la distinción de Personalidad Meritoria de la Cultura del ministerio (Resolución No. 0106) y es condecorado por la Municipalidad Distrital de Miraflores (Resolución No. 224).

Este año se llevará a cabo el Pepetón, el Primer Festi Homenaje José Borja – José Alvear que se realizará los días 16 y 17 de julio con el costo simbólico de S/. 10.00 por fecha (Yape: 997956684 / CTA BCP: 215-02175433-0-03 / CCI: 002-21510217543300328). Vale anotar que todo lo recaudado será entregado en calidad de donación para ambos artistas, recientemente dibujados por el caricaturista Samuel Ranilla.  

En: Suplemento Dominical del Diario El Pueblo. Arequipa, 11 de julio del 2021. 

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